lunes, 12 de enero de 2015

SuperCortito.

Viajar al centro de lima siempre será para mi todo un locón, lo bueno es que hay un solo bus que me deja ahí, pero igual, estresarse con los malos conductores, los tipitos de amarillo y encima con los chicos que suben a cantar, yo no tengo nada contra ellos, pero siempre me toca la suerte de que cuando empiezan a cantar se detienen justo al ladito de uno -¡Hey, el carro es grande!- gracias al cielo llevo audífonos, pero a veces no funcionan al 100% por que el ruido es más fuerte , otras veces suben otros chicos a contar sus historias, la mayor parte del tiempo llevo mis monedillas para colaborar - no soy tan malvada - creo que hay gente buena como gente mala, hay gente que parece que las cosas que dicen les pasan y otras que como repiten las mismas palabras del anterior que subío 15 minutos antes no se le cree nada, he aprendido a que en este mundo uno tiene que ser un 30% de desconfiado.


1 comentarios:

Erik! dijo...

Y no te ha jodido el corredor azul? A mí, ir al centro ya no es lo mismo... sí, a mí tampoco me gustan que suba gente a los carros a contar sus cosas... y ahora la última es que rapeen diciendo cosas que ni ellos mismos se la creen (sorry pero mi desconfianza es peor que la tuya jeje).

Sí, si se reúnen esta vez me gustaria ir (espero no salar nada) te escribo al correo que me diste.

Saludos!

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-Eres feliz?
-Soy feliz. Jamás me he sentido tan bien. ¿Y tú?
-¿Yo?, estoy de maravilla.
-¿Hasta el punto de llegar a tocar el cielo con un dedo?
-No, así no.
-¿Ah, no?
-Mucho más. Al menos a tres metros sobre el cielo.
 
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